Un filme como Le fabuleux destin d'Amélie Poulain (Amélie) está compuesto por un guión, una propuesta de fotografía y de sonido, entre una docena de más categorías audiovisuales, pero al final conforma “Una película”. Tanto nuestras vidas como la Vida de Amélie, se componen por un familia, unos sueños, unos recuerdos o acontecimientos día tras día que configuran “Una vida” “Una Gestalt”, un todo que es una unidad.
Dentro de esta unidad, se pueden diferenciar dos elementos, figura y fondo. En primer lugar, Amélie ha vivido a sus veinticinco años con una falta inmensa de contacto interpersonal, ha vivido sin amor en su vida, generando de esta manera una figura (necesidades que tiene el ser humano y van emergiendo, tales necesidades en su existencia movilizan energía física o mental).
Algunas figuras se cierran por parte de la persona de una forma consciente y después desaparecen siendo satisfechas. Pero aquellas que no se cierran, el organismo de la persona lo hace de una forma no consciente, para continuar adelante y preservar el equilibrio “Homeostasis” un proceso inherente como nuestro proceso fisiológico de respirar.
Cuando se cierran de una forma no consciente, generan patologías como la neurosis, vista en el filme en Amandine Fouet , la madre de Amélie; una señora atormentada, incapaz de nivelar las fuerzas en su interior, quebrantable con una pequeño y fugaz contacto de manos como la escena donde describían su personalidad en el mercado de frutas .
Como declara Perls (1976) Para que el individuo satisfaga sus necesidades, para crear o completar la Gestalt. Para pasar a otro asunto, tiene que ser capaz de sentir lo que necesita y deber saber cómo manejarse a sí mismo y a su ambiente, ya que incluso las necesidades puramente fisiológicas pueden ser satisfechas únicamente mediante la interacción del organismo y el ambiente. (Pág.23)
Luego viene el fondo, que lo conforman lo que hay detrás de la figura (aquel pasado que posee cada persona) en este caso, aquel momento en la infancia de la pequeña Amélie dónde sus padres la dejaron sola, aislada tanto física y mentalmente. Pero, “El pasado, pasado está”, por lo tanto el fondo es importante para entender la figura, pero tanto nuestra joven Amélie como las personas al presentar una figura, deben enfocar su concentración en ser consientes y encontrar el sentido de la figura en sus vidas para poder cerrarla su necesidad de forma satisfactoria.
“Es Obvio que comprender el presente puede ayudar para llegar a enfrentarse al futuro. Sin embargo, resucitar el pasado no compone el presente y además complica el Futuro” (Castañeda, 2002,Pág. 55)
Es de esta forma, con una figura, es que comienza el filme de Amélie Poulain, con el descubrimiento de la caja de juguetes de Dominique Bretodea. Aquella felicidad que experimenta Amélie cuando cumple con su meta, aquella caja perdida hace varias décadas crea en ella una figura, un deseo de servir como justiciera del amor en todas sus expresiones, introyectando el amor que quisiera tener ella, ahora puesto sobre la vida de los otros.
Dentro del filme existen una figura por cada personaje, ya que cada uno posee una vida (Amélie Poulain, Nino Quincampoix, Raphaël Poulain, el padre de Amélie, Amandine Fouet la madre de Amélie, Suzanne, Gina la compañera de trabajo de Amélie, Joseph, Georgette, Raymond Dufayel, Madeleine Wallace la portera, Lucien, El Viejo Collignon, Hipolito, Dominique Bretodeau el hombre de las cajas y La stripper) Además de las figuras producto de las relaciones interpersonales entre todos.
Entre las más resaltantes figuras vistas en el filme a parte de la necesidad de contacto de Amélie, se pueden encontrar la necesidad de Raphael Poulain por viajar y Madeleine Wallace por cerrar la puerta que le dejo abierta el amor de su esposo fallecido. Estas figuras como las demás poseen un diagrama de ciclo que tiene diferentes partes en relación de la aparición de la figura y su final: sensación, figura, movilización de energía, pre contacto, contacto, y post contacto.
Madeleine Wallace, sintió una sensación cuando supo que su esposo la engañaba con su secretaria, lo que creo una figura que era la falta de lealtad de la persona que tanto había amado, todos los días después de su muerte lo recordaba con rencor, movilizaba energía en pro de entender por qué la había dejado y por qué la había mentido. El tiempo pasaba y su vida se iba quedando en el recuerdo del pasado, trataba de hacer un pre contacto hablando del tema como en la pequeña conversación con Amélie cuando ella buscaba el dueño de la caja, pero se quedaba en un recuerdo de la memoria en voz alta. Su vida quedo atascada hasta que Amélie hizo por medio de la carta, una historia de una correspondencia atrasada durante muchos años, lo que significo un camino directo entre Madeleine Wallace y su figura, un contacto. Para luego tener un Post contacto, que era comprender el amor que su esposo le había tenido después de abandonarla (aunque no fuese cierto). Amélie logró que ella lo perdonara en su interior, y pudiera cerrar esta figura, y conservar su proceso de homeostasis.
Como Madeleine, cada personaje dentro del filme tiene su figura que cierra al final del filme, algunos de forma consciente, y otros de forma no consciente, pero cierran, porque la vida continúa. Constatemente llevamos figuras en nuestra vida inconclusas, que consumen energía. Si nos detenemos un momento y comprendemos, primero que todo ¿Cuáles son? y ¿Por qué están? Y luego cómo me puedo movilizar para cerrarlas, tendremos gran parte en la solución de conforman una vida equilibrada que en conjunto se verá como un persona funcional y feliz.
BIBLIOGRAFÍA
Castañeda, Celedoniao. 2002. Terapia Gestalt. Enfoque centrado en el aquí y el ahora. Barcelona.
Perls, Fritz.1976. El enfoque guestáltico. Ed. Cuatro Vientos, Chile.
FILMOGRAFÍA
Jeunet, Jean-Pierre .2001.Le fabuleux destin d'Amélie Poulain (Amélie). Claudie Ossard / UGC. Francia.
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